viernes, 6 de enero de 2012


"¿Cuándo vendrán los días de sol, y no tener esa nube en el cielo?,
¿Cuándo vendrán las noches de estrellas, y no tener más mi casa ese techo?,
¿Cuándo vendrá la canción primitiva, y no tener más sobre mi corazón... una cabeza?"

sábado, 29 de octubre de 2011

Todavía recuerdo.



Todavía recuerdo las arrugas de tu cara, sus ojos pequeños, su opaca mirada (qué poco sentido inmersa entre tanta luz), su pelo gris y abultado.
Todavía recuerdo mis migrañas, mis caprichos, mi espíritu rebelde, no rendirme ante nada, y aún llevo a cuestas todo esto.
Todavía recuerdo hablar contigo sin decir nada, tu mirada, el mar... el café por la mañana, las caminatas, tu abrazo y también tus lágrimas.
Todavía recuerdo lo que es pasar miedo, frío, hambre, llegar empapada de madrugada, la luz de una vela, las puertas trancadas.
Todavía recuerdo cuando quería cantar, enseñar, ¡ser astronauta!, cuando me preocupaba que cayera la noche y no pudiera perderme entre tus ramas, la luz tenue de la farola, el fuego que hacía arder mis ojos, el pasillo que llevaba a tu casa, la vereda rota, las guerrillas de agua, el granizo, la luna plateada, el telescopio, la guitarra, los secretos, el vino, los cigarros, el mate, tu casa en horario de clase.
Todavía recuerdo el sabor de tus besos, tu pelo, tus ojos, tus abrazos, tu mano apretando la mía, tus palabras, tu imagen presente en mí constantemente, te quiero a mi lado...
Todavía recuerdo nuestras discusiones, mis "me voy de casa", echarte de menos, componerte una canción, retorcer tu foto, escribirte una poesía, quererte lejos, quererte cerca, quererte simplemente, la seguridad que me inspiras, la inteligencia que no heredé, tus manías, tu forma de querer.
Todavía recuerdo tus ojos que no tienen un solo color, tu dulzura, comprensión, tu manera de entender, tu apoyo, tu llanto, tus besos, tus palabras, tus "te quiero" al otro lado del teléfono.
Todavía recuerdo que no quiero tener que enfrentarme a tener que simplemente recordarte.



jueves, 13 de octubre de 2011




Ya un mes...


"Parece que fue ayer cuando se fue
al barrio que hay detrás de las estrellas,
la muerte, que es celosa y es mujer,
se encaprichó con él
y lo llevó a dormir siempre con ella"

viernes, 26 de noviembre de 2010

Tristeza


¿Por qué no puedo entregarme al más cómodo sentimiento de desilusión, desesperanza y abatimiento?

martes, 6 de julio de 2010

Ni me mata ni me hace más fuerte


Quiero drogarme con algo fuerte, beberme un río de alcohol, quiero llenar de humo mi cuerpo y después respirar aire puro con rayos de sol.
Quiero que me des más dolor, y comprobar que ni me mata ni me hace más fuerte, quiero llorar en tu balcón un montón de gotas heladas.
Hipotérmicas mis manos te escriben unos versos mal logrados que se borran, se cortan, se hacen daño; me rompiste el corazón en mil pedazos y ahora quiero resurgir de un salto de mi cama que ya es tumba.
Despeinada y resignada me entrego a la locura ambigua de esa razón que siempre viaja inherente a mis pedazos de cordura, de amargura y pletórica ansiedad, no me dejes razón, no me digas lo que valgo, me podría estimular...

viernes, 21 de mayo de 2010

Perder


Cuando vuelven a remontar vuelo las ilusiones vencidas suelo temer el desconsuelo en mi mirada perdida; si ríes me confundo y me escapo de mi ser, me miro de lejos a veces y me siento impertinente, incoherente, maldita.
Cuando las rosas dejan de pinchar ya no son rosas, son alguna flor más; yo no quiero ser una flor, ni una rosa, ni un jazmín que huela bien.
Mi tropiezo me enseñó alguna vez a levantarme de la nube rota cuando deambulan por mi patio los recuerdos del pasado.
Y cuando mi cielo se quede nublado habré de salir al centro de mi mente un instante plateado que me devuelva al interior del refugio que quise perder alguna vez, quizás mi reflejo se divierta viéndome caer, puede que mi vida penda de un hilo cuando intente volver a nacer, renacer de pobres… renacer de madrugadas acompañadas, renacer de un vestigio de asombro que nunca se fue.
Al fin y al cabo me gusta perder…

sábado, 8 de mayo de 2010

Frágil


La fragilidad se rompe y se convierte en añicos de rabia, trozos de desilusión y soledad perpetua.

¿Quién te has creído?